sábado, 15 de septiembre de 2018

La ruta Azul, Saltando por América

Saltando por América

La Ruta Azul, lo conocido desconocido


Etapa 1




Este año decidí y me prepare para emprender un proyecto que me lleve a recorrer toda América, sin plazos, pero con muchos deseos de cumplir con objetivos personales y simplemente comenzar a recorrer junto a mi kangoo nuestra hermosa América. Uno de los deseos más grandes que tengo es poder fotografiar nuestro continente y sueño con llegar hasta Alaska, sé que será difícil y se necesita de mucho dinero, pero lo voy a intentar, no tengo apuro y un día llegare. A corto plazo ya tengo algunos planes hoy les hablare de la primera etapa de viaje, ya que hubo una etapa previa que tiene que ver con la preparación y otras cosas que ya les estaré contando, en otras entradas.





Recorrer América no es moco de pavo, como diría mi amigo, pero realmente promete ser una aventura fuera de serie y una más de mis tantas locuras por seguir conociendo este mundo hermoso. Esta nota es para hacer algo que aprendí en fotografía, capturar la escena, previa al momento de acción, antes que lleguen los personajes, una montaña antes que llegue el atardecer, o un sillón antes que venga alguien a sentarse, es un sano ejercicio para ver si algo se puede mejorar o incluso para la posproducción, ver cosas que después durante la escena no logramos ver porque estamos enfocados en otras cosas. En este caso les voy a contar como viene el plan para esta primera etapa, cuales son los logros que voy a buscar y cuáles son mis preocupaciones. La kangoo está lista para viajar, todo está andando y no le falta nada para ser mi hogar durante los próximos meses y esperemos años, ya les estaré compartiendo el post con todos los detalles que tiene la camioneta y algunos tutoriales para los que les interese aprender más. A pocas semanas de partir y luego de varias idas y venidas tome la decisión de ir a Córdoba para estar un tiempo con unos amigos y pasar mi cumpleaños 30 por allí, será un momento de preparación para la etapa dos de esta aventura, pero empecemos con la etapa 1 para no marearnos.

La ruta 3 es muy conocida por ser el corredor comercial de la Patagonia Argentina, en el pasado la Patagonia se abastecía en su mayoría por barco, y una pequeña parte en avión, por ello las costas del atlántico están llenas de puertos que guardan esa historia, los tiempos cambiaron las formas de transporte fueron mutando y la construcción de la ruta dejo atrás el comercio marítimo, sus huellas están por todos lados en estas zonas y yo voy en busca de ellas. Es una ruta de vital importancia en la actualidad, con mucho tráfico a todas horas, pero a nivel turístico no tiene mucho que ofrecernos. Al menos eso pensaba yo antes de preparar este viaje. Yo vivo en Tierra del Fuego desde los 12 años y por 18 años hice esa ruta para llegar a mis destinos más al norte en vacaciones, siempre de la misma forma, rápido para que esos 2000 km de ruta no sean una pérdida de tiempo. Con esa idea comencé a averiguar nuevos destinos y partiendo de aquellos puntos turísticos que existían, descubrí que hace un tiempo se está desarrollando lo que se llama la Ruta Azul, un nuevo corredor turístico que no es ni más ni menos que la ruta 3 pero accediendo a los lugares que hasta ahora yo solo conocía por un cartel.

 El océano atlántico baña las costas de la Patagonia argentina y nos regala un sinfín de paisajes costeros para disfrutar, claramente no es una ruta muy turística por el momento, pero promete crecer con los años, sin embargo, decidí hacerla en 20 días, un gran cambio si pensamos que el promedio era en 24 horas hasta el momento, en mis anteriores viajes. Comencé la etapa que a mí más me gusta la etapa de soñar, de verse en esos lugares e imaginarme lo que me gustaría que me sucediera, ver el cronograma para organizar los días y las atracciones de cada lugar, en mi caso siempre tengo un plan para no perderme de entrar a ciudades interesantes por no informarme antes, pero no es para nada rígido, es muy flexible y durante el viaje me dejo llevar más por mi intuición para decidir cuantos días me quedo en cada lugar. Cuando comencé a organizar los lugares, un viaje de tres días paso a ser de 10, luego 12, luego 15 y ahora no se si lo llegare a ver todo en 20 días o si dejares cosas para alguna ocasión, realmente les digo que mientras más investigo, más lugares y más tomas fotográficas pasan por mi mente, me las imagino en una foto nocturna o en un atardecer sin darme cuenta que todo eso lleva muchos días. Realmente es una ruta increíble que va desde Camarones hasta Piedrabuena, pero yo agregare la zona de península Valdes en Puerto Madryn y Cabo Vírgenes en Rio gallegos. Cuando comience el viaje podrán ir siguiéndolo a través de las redes sociales que estoy empezando a preparar para ustedes, compartiré fotos e historias de lo que vaya sucediendo, espero estar a la altura de este enorme compromiso, y tentarlos para que muchos lo realicen en algún momento.

No es fácil dar el primer paso, siempre es el que más cuesta, especialmente luego de más de 6 meses asentado en un solo lugar, aunque parece poco, creo que uno ya comienza a relajarse y cuesta volver a rodar las rutas, pero una vez que estas en el camino solo te resta seguir, abandonar en ese momento no es una posibilidad, que hermoso es viajar!!!.

En mi caso adentrarme en una ruta que tantas veces cruce pero no me detuve, siento que no le di oportunidad de sorprenderme, leí algo otro día, “alguien creativo es aquel que ve donde todos miran, pero ve algo que los demás no ven”, y esta analogía será la base de esta primera etapa, poder fotografiar una ruta que todos los sureños creemos conocer pero que en realidad está lista para ser descubierta desde una perspectiva totalmente distinta y será un gran desafío para mí, ya que es una zona con un clima muy hostil, vientos constantes, frio y caminos no muy transitados cada vez que nos desviamos de la troncal ruta 3. Como meta personal me propuse disfrutarlo al máximo, eso significa quejarme lo menos posible del clima y poder conectarme con el lugar, quiero averiguar y entender como hacen aquellas personas que lo viven a diario, como hacen para adaptarse y vivir con un nivel de soledad y tranquilidad que a muchos asustaría. Voy a buscar historias, para emprender otros de mis grandes proyectos que incluye el viaje, escribir un libro contando mi historia y las historias de mi historia, y digo esto porque siempre aquel que cuenta una anécdota aporta y transforma la realidad, a pesar de que intentemos decir todo sin deformar la historia, hay cosas que la persona que escucha no puede sentir ni ver, siempre ese relato pasa por un filtro personal. Busco ser esa persona que recolecte historias dignas de contar, poder compartir y que el filtro que ponga sea lo más agradable que pueda, de eso se trata esta aventura, seguir aprendiendo de lo que me hace más feliz.

Toda historia tiene un principio y este es el inicio de la mía, la kangoo comienza a rodar, el tiempo empieza a pasar lento y los días dejan atrás esa rutina que los envuelve, el misterio y la sorpresa comienzan a ser cosa de cada minuto, todo es nuevo para mí, y lo nuevo tiene esa mística que me atrapa. Una experiencia totalmente nueva para mi salir con mi morocha una Nikon D5300 y parar en cada lugar que amerite una fotografía, sin prisa, tomándome todo el tiempo necesario para que la foto quede bien, lo que se puede llamar un fotoviaje, donde el objetivo uno será aprender a tomar fotos, superarme día a día y mostrar al mundo las bellezas de la naturaleza y también de la transformación del hombre sobre ella.

El primer destino será la Ruta Azul, para conocer el océano atlántico en profundidad y regalarles las mejores tomas que pueda conseguir para que puedan transportarse a esos desolados lugares, los paisajes costeros, las historias de naufragios y descubrimiento que guardan entre sus pueblos, grandes aventureros como Magallanes, Darwin, Drake y el comandante Piedrabuena observaron estos mismos paisajes hace muchos años, incluso el creador del místico libro El Principito, Antoine de Saint-Exupery, trabajo en la primer compañía aérea que surcaba estas zonas. En estas tierras está escrita la historia de un momento dorado cuando los frigoríficos y el ganado ovino crecían exponencialmente en base a los requerimientos de una economía textil británica en auge que requería de materia prima, en estos lugares se llevó a cabo la huelga más importante de principios del siglo XX, contada en la película La Patagonia Rebelde, conocer las razones de su agonizante caída económica, como se reinvento esta zona para continúan siendo atractiva para los que la habitan y cuáles son sus expectativas para el futuro. Comienza la historia de lo conocido desconocido, aunque suene paradójico y hasta incoherente es así, los invito a acompañarme en las redes sociales.   
  



Buena Ruta y largamos, próximamente tendrán noticias nuevas, y muchas fotos.

viernes, 14 de septiembre de 2018

La Kangoo Viajera


La Kangoo Viajera


Esta es una historia de sueños, amor y de paciencia, que demuestra que el valor de las cosas va mucho más allá de un tema económico, casi intuitivamente las veces que alguien me pregunta si la vendo, respondo con total tranquilidad que la Kangoo no se vende, no creo que tenga un precio que se pueda pagar, es mucho más que solo un vehículo.







En esta ocasión les contare una bella historia, que comenzó como un sueño y seguramente los que me escuchaban hace más de un año decir que me iba a comprar una Kangoo y que iba a viajar por el mundo en ella, pensaron que estaba loco o que solamente estaba hablando cosas al sin sentido, y creo que tenían razón, hasta para mí era difícil creérmelo en ese momento, mi vida en ese momento era distinta, hoy encaro puedo decir que eso cambio, la encaro de una forma mucho más arriesgada que en ese momento, busco hacer lo que quiero en cada momento y hacerle mucho caso a mi intuición, hoy puedo decir que cuando cuento las locuras que voy a hacer, a diferencia de aquel momento, sé que muchos ya no dudan de que lo vaya a hacer o al menos lo voy a intentar. Perder el miedo a ciertas cuestiones relacionadas con la clásica zona de confort es uno de los logros personales más importantes de este tiempo.




 La idea de la Kangoo apareció luego de ver una pareja de argentinos que fueron hasta Alaska con su camioneta, “La Kangooneta” para los que la quieran buscar, ellos inspiraron la idea ya que yo había pensado en comprar algo más grande y como todo futuro viajero, saciaba mis ganas de andar por el mundo mirando como lo hacían otros, a veces nos conformamos con muy poco y tenemos esa penosa manera de poner en pausa los sueños, detrás de miles de escusas. Fue entonces que empecé a ver potencial en esta camioneta desconocida totalmente para mí, por el tipo de vehículo, al estilo furgón de carga, nunca antes me había imaginado subido a algo así, ¿cómo pueden cambiar las cosas no? La realidad es que solo lo soñaba, me imaginaba en una Kangoo y pensaba las cosas que le modificaría, pero solo quedaba en esa ilusión transitoria, la realidad es que nunca me desespere y eso fue importante. Incluso paso casi un año desde los primeros planes hasta que compre la camioneta. Nunca me desesperé y eso tuvo su premio. Cuando la vi en los clasificados en enero de este año, el dueño estaba de vacaciones y decidí esperarlo, era la camioneta que buscaba lo sentía, buen precio, pocos kilómetros y bastante cuidada, con el plus que tenía 7 asientos, era la opción perfecta en ese momento.




Así fue como la primera parte de mi sueño se hizo realidad en enero de este año, solo contaba con 20 días para ver que este todo bien y salir de vacaciones con mis hijos. Ese fue el primer viaje de la Kangoo casi sin hacerle nada más que ponerle una porta objeto en el techo y algunos arreglos mecánicos, ya que viajábamos con los primos de mis hijos desde Tierra del Fuego con destino a La Rioja, en total 7 personas viajando por cerca de 4000 km, cargados a mas no poder. Este viaje no termino en ese destino, luego de la Rioja continuo, pero solo mis hijos y yo, viviendo por más de un mes y medio en la camioneta, paseamos por varios lugares de Argentina, visitando la familia y amigos dispersados por el país. Un viaje en el que recorrimos en total 13 mil kilómetros, con una parada en Córdoba, donde junto a mis amigos le agregamos varias cosas y le hicimos todo el mantenimiento necesario para muchos más kilómetros de viaje sin complicaciones, soy de evitar mucho el mantenimiento de mis vehículos, pero con la Kangoo es distinto, disfruto el dinero que le gasto.  










Este primer viaje fue la prueba de que esa Kangoo llegaría muy lejos, estábamos todos encariñados con ella, y que además tenía todo lo que necesitaba para ser un hogar cómodo en un largo viaje, fue así que decidí trabajar algunos meses para agregarle todo lo que necesitaba para ser una Kangoo Camper. Fueron largos meses de trabajo y en los ratos libres avanzar yo mismo con las reformas a la Kangoo, y si se podía el fin de semana escaparse a algunos de los bellos lugares que tiene Tierra del Fuego. Me gusta decirle KANGOO GENERADORA DE MOMENTOS, porque realmente logro que todo mi entorno la pueda disfrutar, cargábamos a todos los que entraban y salíamos a cualquier lado, fue muy mágica realmente. Se usó tanto que a los 6 meses de comprada, la camioneta ya tenía 30 mil kilómetros rodados con migo, son muchos si pensamos que era 2012 y tenía 95 mil cuando la compre. Pero es para eso como siempre digo, para usarla hasta que no sirva más, tengo un amor tremendo por la Kangoo pero creo que la mejor forma de demostrarlo es usándola y no estar pendiente de los cuidados y las roturas, quiero que todo funcione pero si se raya si algo se rompe, es secundario la prioridad es que viaje por todos lados, vino a mi vida para eso, no para ser una pieza de museo o modelo de fotografía, aunque es la Kangoo mas fotogénica que conozco, muchos me lo dicen en la calle, y sino miren estas fotos recolectada en sus viajes por Tierra del Fuego y opinen ustedes mismos.









Ahora me toca comentarles un poco las cosas que le fui poniendo a la Kangoo para que sea cada vez más cómoda. Muchas ideas se hicieron realidad, también muchas no las termine llevando a cabo, ya sea por su costo o porque no terminaron siendo realmente importantes, también quedan algunas reformas para este tiempo que se irán haciendo con paciencia, cada viaje me ayuda a darme cuenta de que le falta, y que no es tan importante. Comencemos desde el exterior hacia el interior.
Por fuera los cambios no son muy notorios, la porta equipaje o canasto de supermercado como le dicen mis amigos está a la vista y permite que todo lo que no pueda ir adentro tenga su lugar, además aloja la rueda de auxilio y los bidones de nafta en caso de necesitarse. Para una mayor comodidad al poner las cosas arriba y sin hacer piruetas al subir, le puse una escalera, que además le quedo muy fachera. Además, tiene una luz led bastante poderosa hacia adelante y una hacia atrás para condiciones que lo requieran, o algún arreglo de emergencia del motor. La camioneta cuenta con GNC como lo denotan los dos tubos tras las ruedas traseras, mi hijo les puso cariñosamente, los miñon. Otro de los últimos agregados es el toldo, que además lo arme completamente con mis manos, tomando ideas de algunos videos y adaptándolo a mis necesidades, y aunque por estas tierras frías del sur no es muy útil, si lo será en las aventuras que me lleven hacia el norte. También cuenta con dos paneles solares que son rebatibles para guardarse en el interior, con ellos puedo cargar la batería sin necesidad de prender el vehículo. A futuro tengo pensado solucionar el tema del baño, armando un calentador solar, ya estoy pensando varias ideas y en algún momento se hará realidad. Algo muy importante que tiene la Kangoo y que para mí es prioridad, es que todo sea desmontable para darle esa flexibilidad de poder ser un micro Motor Home o un simple auto de calle de uso diario, creo que lo vengo logrando bastante bien haciendo que todo pueda sacarse si no se utiliza. Me estaba olvidando de algo muy importante y aunque no esté siempre en la Kangoo, le coloque un gancho atrás para colgar una hamaca paraguaya, y con solo encontrar un punto más de anclaje, ya sea árbol, pilar, madera o lo que sea. Y no les quiero mentir pero debe haber pocos lugares más cómodos que esa hamaca. También esta polarizada por mí, nos llevó un día completo de renegar con amigo y no quedo perfecto, lose pero cumple su función y a mí me encanta.







Y ahora lo más importante el interior, ya que cuando estamos en movimiento no hay nada más importante que tener un refugio, en la comodidad de un hostel o en la humildad de una carpa, pero tener un techo, eso lo saben todos los que alguna vez anduvieron mochiliando, ya que es algo que tienes que resolver a diario. Viajar en un vehículo te da esa tranquilidad, poder estacionarla en cualquier lado y dormir en ella. Pensando en esto lo primero que nombrare es el colchón que aunque no lo crean con su reducidas dimensiones, la Kangoo puede albergar un colchón de 1,30 por 1,90 metros, si exacto una cama de dos plazas, en las fotos pueden ver cómo queda armada, todo un lujo. Acá tengo que darles algunas recomendaciones desde mi humilde experiencia, al principio usaba un colchón inflable, la verdad no fue una buena experiencia, se pinchaba bastante seguido, incluso algunos pinchazos eran tan pequeños que no los podías encontrar para reparar y debías levantarte cada 3 o 4 horas a inflarlo nuevamente, y esto de inflarlo es todo un tema, me ha tocado, estar fuera de una plaza inflando el colchón y recibiendo las miradas de muchos, la realidad es que nunca tuve problema pero es más cómodo poder armar todo sin llamar mucho la atención, por ello decidí poner un colchón que se desarme en 3 partes para poder transportarlo fácilmente, cada parte tiene su funda en cuerina para poder limpiarse fácilmente, ya que no solo cumple la función de cama durante un viaje, sus usos van desde sillón hasta mesa. A mí me gusta dormir hasta tarde y para lograr eso tuve que armarle unas lindas cortinas celestes, con un sistema de abrojo muy interesante para subirse y bajarse rápidamente, cosidas a por mí y mi querida madre que me dio una mano enorme con estas dos cosas que nombre de la camioneta, seguramente no muy convencida de las locuras que hago, pero no la culpo debe ser difícil tener un hijo como yo, y al fin y al cabo las personas no necesitan que les digamos como vivir, necesitan que si lo deseamos les demos una mano en lo que podamos, sin obligaciones y sin meternos en si está bien o mal, ¿o acaso alguien tiene la fórmula de la felicidad?, no creo que exista algo parecido.







Otras de las cosas más importantes en un viaje largo y porque no en un hogar, es la electricidad, sino imagínense sus vidas en una casa sin electricidad. La Kangoo cuenta con una batería adicional a la del motor, la cual es de gel permitiendo la carga y descarga al 100% sin comprometer su funcionamiento, la misma está conectada al alternador para cargarse, o caso contrario se usan los paneles solares, toda la instalación hecha por mi después de quemarme las pestañas averiguando en internet y teniendo que reemplazar componentes que acá no conseguía, como digo siempre no habrá quedado perfecta, pero cumple su función. A partir de acá arme toda una instalación eléctrica con dos líneas de tensión una a 12 volts como sale de la batería, para alimentar las luces led blancas y azules que están por todos lados en la camioneta, luz led azul bajo tablero, luz blanca testigo, luz azul para cuando estamos acostados, y lo que yo llamo luz de día, que es una línea especial de luces blancas para encontrar cualquier cosa que se pierda en la camioneta. También el esterero funciona con esta línea para usarlo todo el tiempo que desee sin preocuparme por descargar la batería principal, además tiene 4 parlantes muy grandes que se escucha lindo y algunas otras cosas menos importantes. Luego cuenta con un conversor de 12 a 220 volts para poder usar todas las cosas que normalmente usaríamos en una casa, cada asiento tiene su tomacorriente individual para mayor comodidad de los que viajan, la verdad que es de las cosas más útiles, tener una batería adicional y no estar pendiente que gastar la del motor y que luego no podamos arrancar para irnos, les aseguro que una batería auxiliar puede ser una solución a muchos problemas de comodidad. También el sistema cuenta con la posibilidad de conectarse a una red de 220 externa, por ejemplo, en una casa o un camping para no usar la energía almacenada en la batería.




La camioneta cuenta de fábrica con una tercer fila de asiento que es rebatible, la cama puede armarse tanto con los 7 asientos o sino también mediante las dos cajoneras o campers que van el lugar de los asientos para viajes más largos y con menos personas, como ven en las fotos, entre ambos campers cubren todo el baúl, 1,20 x 0.80 metros para guardar todas las cosas que andan dando vuelta en la camioneta, con gavetas y cajones para un mejor uso, en las fotos se puede ver con detalle, todo lo hice yo solo comprando madera y tornillos.





Otros agregados para dar mayor orden y comodidad al viajar son las redes portaobjeto agarradas al techo que ayudan a guardar camperas y otras prendas, almohadas y frazadas que andan dando vueltas en el vehículo. También tiene un portaobjeto o en mi caso posa mate ya que es para lo que más lo uso, ubicado en el tablero en la parte del acompañante, muy útil realmente y lo armamos con un amigo usando madera reciclada de mi casa. La camioneta también cuenta con alarma y cierre centralizado, también instalada por mí, luego de muchas pruebas y horas de lectura en internet. Otra curiosidad de la Kangoo que la disfrutan mucho más mis hijos, es una tele de 24 pulgadas rebatible, muy útil para mantener a los chicos calmados en viajes largos, conectas la play o pones una película, y cambia todo realmente, en estos tiempos es difícil tener entretenidos por tantas horas a los chicos. Yo que no soy de ver televisión, no la utilizo mucho, incluso si viajo solo la dejo porque es peso muerto, pero la opción siempre está disponible.






Las horas dedicadas a la camioneta realmente fueron muchas, creo que son las más aprovechadas de este año, ya que es muy lindo poder hacer uno mismo algo, ver los resultados e incluso disfrutarlo, aunque lleve mucho tiempo de lectura y preguntas a conocidos, aunque lleve más dinero y aunque no quede tan prolijo, el estar hecho por mi creo que marcó la diferencia y es la principal razón de como un objeto material, en este caso una Kangoo logro que le tuviera tanto cariño, se creó un vínculo raro, que roza la locura seguramente para algunos de ustedes, si me vieran en momentos de riesgo como le hablo y le doy aliento para que suba una montaña con hielo, o para que salga del barro cuando no tracciona, o cuando le agradezco con fervorosa alegría, luego de muchas horas de manejo haber llegado a destino, es placentero ver que lo que uno soñó se fue haciendo realidad y que recién entro a mi vida y ya me dio más alegrías que todos los autos anteriores que tuve, y lo más lindo es saber que vienen muchos viajes más, este es el principio de esta relación.
Muchas personas aportaron para que esta Kangoo este así, aunque a mí me gusta la soledad para concentrarme, la Kangoo tiene un poco de cariño de todas las personas que me rodean a diario, no tengo más que agradecerles a todos por el tiempo dedicado.









Creo que luego de este largo relato sobre el vehículo que permitirá mi recorrida por América, solo me queda despedirme y decirles que me acompañen en esta aventura, conoceremos lugares y personas increíbles, ojalá logre encender esa llama nómade que todos tenemos adentro. Y ya saben que la Kangoo es la responsable del canguro y de nombre que uso en las redes sociales para contar mi viaje “SALTANDO POR AMERICA”.

Buenas rutas y hasta la próxima entrada.